El Paro General llevado a cabo el pasado jueves, sin dudas, dejó expuesto un conflicto existente dentro de la Unión de Tranviarios Argentinos (UTA) y la grieta se ensancha cada vez más entre los choferes: si bien la mayoría de las líneas se adhirieron a la medida de fuerza, otras decidieron sacar sus móviles a la calle para levantar pasajeros, mientras que otras cortaron antes de las 24 horas como estaba pautado y salieron a circular para trabajar.
Este viernes, el móvil de Modo Fontevecchia llegó a la zona de Constitución, uno de los puntos neurálgicos de la Capital Federal donde millones de personas viajan cada jornada sea en colectivo, trenes o taxis, y habiéndose convertido ayer en casi un desierto por la poca presencia de ciudadanos moviéndose.
Según contó el periodista, Juan Cruz Soqueira, los trabajadores de las empresas que abarcan la zona oeste de AMBA y arriban a CABA, se congregaron y se movilizaron hasta la sede central de la UTA. Allí se encontraba Roberto Fernández, el conductor de la UTA disidente, no quiso recibir a sus colegas e integrantes del gremio, tal como lo indicaron fuentes cercanas al cronista del programa informativo de Net TV.
Soqueira ilustró con una postal inesperada diciendo que, en Plaza Miserere y sus alrededores, “no había presencia policial significante” pese a la concurrida movilización de choferes autoconvocados. Solamente unos pocos efectivos de la Policía de la Ciudad a pie, controlando las inmediaciones, a diferencia de la concentración anterior cuando se ubicaron dos patrulleros y ocho uniformados locales.